La Vida Continúa 

En mi niñez escuché un cuento que me ha marcado. La historia se llamaba El Pájaro Azul. Se trataba de dos niños, niño y niña que son hermanos y viven en una pobre casita junto a sus padres y abuela. Un día les cuentan que existe el pájaro azul, que quien lo encuentre será feliz por siempre. Ambos niños parten en la búsqueda de este pájaro y pasan por el pasado, el futuro, el palacio de la dicha, el palacio de la abundancia, el jardín de las delicias, el país de los sueños. en todos ellos ven al pájaro azul, pero no pueden atraparlo, siempre se les escapa. Finalmente los niños regresan a su casa muy desanimados y descubren con asombro que ese pajarito grisáceo que tenían en una jaula era el pájaro azul que tanto buscaban. Moraleja, la felicidad está en lo que a cada uno le toca vivir, en cada situación de nuestra vida podemos ser plenamente felices, independientemente del dolor, la pena, las carencias o los propios defectos. Depende todo de nuestra actitud ante la vida.

Vivir con mi marido que tiene Alzheimer y que poco a poco se va olvidando de las cosas, pese a que pone su esfuerzo por recordar, podría ser una causa de infelicidad para él y para mi, sin embargo, pese a todo somos plenamente felices, nos hemos dado cuenta que lo más importante es el amor mutuo que nos tenemos y la compañía mutua. Realmente eso hace una diferencia, porque el agradecer cada día que Dios nos regala, nos da esa sensación del vaso medio lleno, y nos hace agradecer cada momento que podemos disfrutar juntos, salir a caminar, lavar los platos, preparar el almuerzo, cosas tan cotidianas que uno comienza a agradecer y por esa misma razón te empiezan a hacer feliz. 

La compañía de la familia, entre medio de cuarentenas interminables y mucho video llamadas, la amistad incondicional de los amigos que siempre están preocupados de nosotros y cuando podemos nos juntamos a almorzar o a un café. El poder caminar a la orilla del mar y ver su infinita variedad. Todo ello es fuente de felicidad. Por último el olvidar las cosas tristes que han pasado y no tener rencores en el corazón hacen que cada momento sea un momento único y feliz. Doy gracias a Dios por tener la oportunidad de vivir entre los dos esta enfermedad, de estar juntos en la lucha por retrasar sus manifestaciones y vivir cada día como un regalo precioso. 

Comparto estos pensamientos ya que pueden ayudar a otros que estén pasando por esto y puedan también ver el vaso medio lleno

Comentarios

  1. Que hermosa reflexión Carmencita. Eres admirable

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    1. Lo mejor es que no es imposible, es la mejor manera de vivir, no lo digo como súper mujer. Siempre le tuve terror a esta enfermedad y ahora que la estoy viviendo en la persona de mi marido , me doy cuenta que es un regalo, porque nos ha unido mucho más y nos ha puesto las cosas en orden para apreciarlas por lo que son . La fe es un apoyo infinito

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  2. Te admiro, Carmen, tu capacidad de ver y encontrar la felicidad e medio de las dificultades.

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  3. Las cosas mas duras de la vida, cuando el amor es inmenso y bendecido se llevan mucho mejor y se vive feliz con lo del dia a dia.

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  4. Me alegro profundamente de ver con el ejemplo concreto de ustedes dos como los seres humanos podemos ser felices viviendo el día a día con amor , disfrutando cada momento.

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