Nuevo Año, nuevos desafíos.
Antes de comentar más sobre el Alzheimer, quiero hacer un breve paréntesis para agradecer por el 2020. No ha sido el peor año de la historia para nosotros, por el contrario, tenemos mucho que agradecer. En primer lugar el nacimiento de nuestra última nieta, que por fin pudimos conocer, en segundo lugar el haber sabido de este protocolo Bredesen para revertir el Alzheimer y que pudimos acceder a este tratamiento. Por otra parte el confinamiento nos permitió valorar aquello que dábamos por seguro, el ver a los amigos, estar con la familia, salir libremente, la salud, y un gran etcétera, por lo que hemos aprendido a ser más agradecidos y valorar los bienes reales y no los que son superfluos. Ahora fortalecida por los aprendizajes del 2020 me apronto para un 2021 lleno de nuevos desafíos y metas, apoyándome en lo verdaderamente sólido que es Dios y el amor de la familia y los amigos. Este fin de año recibimos nuevas noticias sobre la salud de mi marido. El Alzheimer que tiene es del t...